Fútbol Base 10: Ratas sin escrúpulos.

Ratas sin escrúpulos.

Ha llegado abril y no podíamos esperar que este año fuese diferente a los demás. Con abril comienza la época en la que clubes sin escrúpulos intentan fichar a niños de siete años de otros clubes diferentes.

Su modo de proceder suele ser siempre el mismo, aunque con pequeños matices que a la hora de la verdad no significan nada. Y es que en la práctica es lo mismo que como club informen al club de origen de que van a intentar fichar a Pedrito, de siete años, o que llamen directamente a sus padres sin informar. Porque, llamen o no al club para informar, no están preguntando ni asesorándose sobre en qué condiciones está el niño o si es lo mejor para él. Directamente van a intentar ficharlo, con o sin permiso, y es de eso de lo que te informan. Desconociendo si es lo idóneo o no. Les da igual.


Y les da igual porque los argumentos que utilizan para defenderse son tan incoherentes que invitan a pensar dos cosas. La primera es si realmente se creen sus propios argumentos y, por lo tanto, sean un peligro para la formación de jóvenes deportistas por su clara incapacidad intelectual. La segunda es que no se crean sus propios argumentos pero los utilicen para intentar sacar rédito con ellos, lo cual también los inhabilitaría para encargarse de la formación de niños ante la incuestionable bajeza moral de ese club.

Los argumentos de estos clubes son simples. El primero es que ellos no obligan a nadie a marcharse del club en el que están, y lo dicen echándose flores, intentando dar a entender que quizás podrían hacerlo pero no lo hacen. Y es que no entiendo bien esa defensa basada en "nosotros no obligamos a nadie". Hombre, es que solo faltaba.

El segundo argumento es el rey de la incoherencia. Ellos ven a un niño de otro club que les gusta, juega bien y les llama la atención. Deduzco que es porque tiene unas habilidades técnicas y tácticas bastante buenas y las han apreciado. Hasta aquí no creo que haya debate. Lo gracioso es cuando alegan que ese niño que les gusta es mejor que cambie de club porque va a estar mejor formado en el suyo. ¿Esto es una broma?

Pero vamos a ver, ¿no os dais cuenta de que ese niño os gusta porque precisamente ha aprendido a jugar así en el club en el que está? ¿No os dais cuenta de que el argumento de que va a estar mejor formado en vuestro club, ya solo por eso, no se sustenta? Y por otro lado, ¿no entendéis que el hecho de que cada año tengáis que ir llamando a veinte o treinta niños nuevos para que vayan a vuestro club no habla bien de cómo formáis a los que ya tenéis? ¿De verdad no hay nadie en vuestro club que tenga una capacidad intelectual suficiente para, por lo menos, buscar un argumento que no sea tan absurdo? ¿De verdad que no?


Os voy a poner un ejemplo. Este año hay oposiciones a maestros/profesores. Las oposiciones son un examen que sirve para que las personas con mejor nota obtengan una plaza fija para ese trabajo. Lo normal no es conseguir esa plaza el primer año que te presentas. Hay que estudiar mucho para intentar ser de los mejores y conseguir esa plaza. Tal es así que para que vayas mejor preparado a ese examen hay academias que durante un año te ayudan y te proporcionan material para que lo estudies y tengas así más posibilidades. Es decir, intentan facilitarte las cosas. Las academias dependen mucho de qué tanto por ciento de aprobados consigan cada año, porque eso será la mejor publicidad para que el curso que viene la gente que no aprobó continúe con ellos y la gente que empieza se decida por ir allí y no por otra academia. 

Ahora imaginad que una academia intenta fichar alumnos de otra. Cuando terminan las oposiciones acceden a la lista de notas, que son públicas, y llaman por teléfono a todas esas personas que no consiguieron plaza pero que se quedaron cerca de ella. Personas que han demostrado tener un buen nivel pero, por un motivo o por otro, no consiguieron el objetivo. Se quedaron muy cerca y fueron detalles mínimos, incluso subjetivos, los que desequilibraron la balanza en su contra. Llaman a estas personas y consiguen ficharlas para su academia alegando que con ellos van a estar más preparadas.

La academia de origen, que lleva a lo mejor dos o tres años preparando a esas personas se entera de que están llamando a sus alumnos y protesta. La respuesta que reciben es que no están obligando a nadie a marcharse, que solo les informan de los beneficios que supondría pero que lo dejan a elección del estudiante, que ellos son libres de ir o no, que si se marchan no tienen nada que ver porque les dieron libertad para elegir. Finalmente recurren a que ellos forman mejor a los estudiantes porque tienen al año un tanto por ciento de aprobados superior.

El caso es que consiguen fichar a un grupo de personas que se habían quedado muy cerca de obtener la plaza el año anterior y, finalmente, este año la obtienen. Gracias a ello esta academia mantiene otro año más el tanto por ciento de aprobados, viéndose así legitimados para decir que forman muy bien a los alumnos cuando, en realidad, las personas que aprobaron es gente que ya había estado cerca de aprobar el año anterior. Son personas que ya estaban bien formadas antes gracias a su primera academia y por eso, precisamente, se fijaron en ellas, porque eran buenas y así podrían aprovecharse del trabajo de los demás y así sacar un beneficio personal. Aprovecharse de que otros hicieron el trabajo duro, conseguir desde cero que esas personas obtuviesen los conocimientos suficientes para casi conseguir la plaza, para después ellos simplemente robar los frutos de ese trabajo.

Son ratas sin escrúpulos. Unos hacen el trabajo y ellos se lo roban para después venderlo como propio, ya que lo apreciaron como bueno.

No estáis haciendo mejores alumnos, ya eran buenos y por eso los fichasteis. Y con el fútbol pasa lo mismo, no ganáis ni estáis en mejores divisiones porque estéis haciendo mejor el trabajo. Estáis ahí porque robáis el trabajo hecho durante años por otros y os aprovecháis de él para, aún por encima, venderlo como un logro propio para intentar, otra vez, legitimar el próximo robo. No tenéis respeto por el trabajo de nadie. Hay que desenmascararos porque hay que echaros.